Silencio, hay música… (Mabel)

Una de las partes más divertidas de trabajar en un sello discográfico es que puedes dedicar todas las horas del día que quieras a escuchar música sin sentirte culpable. Forma parte del trabajo.Hay días que a propósito escuchas música que no te gusta demasiado para que no te impida concentrarte en otras tareas y hay días que te encuentras una canción como esta y tienes que parar todo lo que estás haciendo, callarte y escuchar. Nada más.